Se le viene la noche a Manco


MÉXICO.- Han pasado ocho días desde que Reimond Manco regresó a Lima, huyendo de Cancún tras denunciar que sufrió un secuestro al paso, aunque la directiva del Atlante lo desmienta y lo tilde de mentiroso. El jugador se encuentra en casa de sus padres, descansando de la rinoplastia que le realizaron para corregir la desviación de tabique que sufrió tras el golpe que recibió en el supuesto plagio en México.

¿Cuál será su futuro? Es una de las tantas preguntas que muchos se hacen. Y lo que ocurra en un futuro puede estar condicionado por un precedente que ocurrió el año 2003, cuando Ariel Ortega abandonó el Fenerbahce turco.

EL CASO ORTEGA
Tras ser considerado como uno de los jugadores más valiosos de River Plate en el torneo Clausura del 2002, el delantero Ariel Ortega fue transferido a Fenerbahce de Turquía en junio de ese año. El ‘Burrito’ jugó 15 partidos, anotó cinco goles, pero pronto se aburrió. El argentino no se sentía cómodo en su nuevo club y aprovechó una convocatoria de Marcelo Bielsa para hacer sus maletas y no regresar más. Eso ocurrió en febrero del 2003.

El cuadro turco, que lo contrató por cuatro años y pagó 15,5 millones de dólares, le pidió al jugador que regrese, pero este se negó. Ante esto, el Fenerbahce lo denunció ante la FIFA por incumplimiento de contrato. El máximo ente del fútbol mundial, tras revisar el caso, lo suspendió por un año. Es decir, Ariel Ortega no pudo jugar por ningún equipo del mundo durante el 2003.
Pero no fue lo único porque también tenía que pagar una indemnización de 11 millones de dólares, a razón que el argentino había recibido un adelanto de sueldo y por los años que faltaba por cumplir su vínculo con el club.

Pese a los intentos de levantar la sanción, Ariel Ortega dijo adiós al fútbol en noviembre del 2003. Luego recapacitó y regresó, pero solo después que el Newell’s Old Boys llegó a un acuerdo con el Fenerbahce, al año siguiente.

¿Y MANCO?
Pese a que Atlante anunció que Reimond Manco había incurrido en varias faltas graves, —que eran motivo de rescisión de contrato—, hasta la fecha no le ha informado su decisión de no contar con sus servicios al Juan Aurich, equipo que cedió a préstamo al jugador hasta diciembre del 2011.

La directiva del ‘Ciclón’ ya sentó su posición en un comunicado: no van a intervenir hasta que los aztecas se pronuncien oficialmente y a través de un documento oficial.

El panorama no es claro para Reimond Manco y a este paso, podría quedarse sin jugar varios meses y peor aún si la directiva del Atlante cumple con su palabra de denunciar al jugador ante la Comisión Disciplinaria de la Federación Mexicana de Fútbol (FMF), aduciendo que el jugador llegó a los entrenamientos tarde y en estado etílico, que inventó un secuestro y que abandonó el club. Encima, la Procuraduría General de Justicia (PGJ) de Quintana Roo respalda lo dicho por los dirigentes, que el jugador no sufrió ningún plagio.

Con todos esos antecedentes, el jugador podría ser sancionado económicamente y deportivamente. Cualquiera que sea el castigo, tiene que elevarse a la FIFA y esto se haría extensivo a nivel internacional. Dios no quiera, por el bien de Reimond Manco, podría quedar impedido de jugar en cualquier otro país al menos hasta fin de año, fecha en que termina su préstamo en Atlante.

No hay comentarios.: